Una de las situaciones más estresantes en la vida de una persona es cuando quieres hacer un regalo a una persona especial, o ser un gran invitado, pero no sabes qué regalar.
El consumo del vino en España ha llegado a alcanzar los 10,31 millones de hectolitros, según la OeMv. Por lo que podemos afirmar que en España nos gusta mucho el vino, así que regalar vino es un acierto seguro. Siempre y cuando sepas cómo hacerlo.
Puedes regalar vino a cualquier tipo de persona, sea tu amigo, pareja, familiar o un cliente. Solamente debes distinguir qué vino regalar y cómo hacerlo.
¿Qué significa regalar vino?
Una botella de vino siempre es algo original y bastante común en ocasiones especiales. Simboliza la amistad que tienes con aquella persona a la que se lo regalas, es una forma de agradecimiento a una invitación. No solo se regala vino por su valor gastronómico, sino por el fuerte valor simbólico que tiene detrás.
Podemos decir que es un regalo muy adecuado para demostrar cariño, gratitud y respeto.
El vino es un elemento socializador, que hace que se comparta un momento único con alguien. Significa te quiero, pienso en ti, quiero estar contigo, o quiero tener una noche agradable.
El vino te puede ayudar a demostrar lo que te importa una persona, ya que, detrás de una simple botella de vino, hay una gran proceso. Además elegir un buen vino para regalar es una tarea compleja, que en este artículo se va a simplificar.
¿Por qué regalar vino?
Regalar vino es una de las mejores ideas, ya que se producen muchos sentimientos al entregarlo. No es solo es regalar el vino, si no, todo el proceso que hay detrás: qué vino regalar, cuánto me gasto, no saber si le gustará…
Es un regalo apropiado para todos, siempre que no sea tu sobrino de 15 años. El vino gusta a todas las personas, solo debes saber elegir el vino perfecto para el tipo de persona.
Además es un regalo muy versátil, ya que existen tantas variedades de vinos como personas. Puedes encontrar la botella perfecta para la persona a la que se la vas a regalar. Por otro lado, existen vinos de todos los precios, y algunos con una gran calidad y un precio no demasiado elevado.
Si vas a regalar vino, elige uno bueno
Antes de ponerte manos a la obra y buscar un vino, debes pensar en para qué va a utilizar ese vino y cuándo se lo vas a regalar, si va a ser en una ocasión especial, o simplemente lo vas a llevar a una comida. Esto influirá en el tipo de vino que regalarás. Además debes pensar en cuanto dinero te quieres gastar.
También, cuando regales vino debes pensar en la comida que le gusta a la persona que se lo vas a regalar, ya que el tipo de vino cambiará en función del acompañamiento. Si es una persona que nunca se pierde el postre, puedes regalarle un vino para postres. Si, por el contrario, es una persona que prefiere el salado, y le gusta tomar un aperitivo salado o una carne, es mejor que regales un vino tinto.
Existen 7 claves para conocer un buen vino, y yo te las traigo aqui:
- Color: el color de cada vino debe corresponder con el tipo de vino que queremos adquirir. Un vino blanco joven debe ser amarillo pálido, si tiene un color muy intenso es mejor que no lo compres, ya que puede estar oxidado. Si quieres un vino tinto, y su color es violáceo, es un tinto joven, y no te maridará bien con las carnes rojas.
- Aromas: si el vino te recuerda a flores, frutas y te sugiere cosas similares al olerlo, es un buen vino.
- Olor y sabor unidos: si observamos que hay mucha presencia y exceso de madera que enmascara los demás aromas, mejor no compres ese vino.
- Equilibrio: el olor, sabor y color, deben estar perfectamente integrados en un todo. Si algún factor destaca sobre otro, el vino no es bueno.
- El alcohol y los taninos: Deben ser vinos suaves sedosos, y no astringentes.
- Persistencia: el sabor de un buen vino debe quedarse en la boca mínimo diez segundos, lo que indica que es bueno.
- Complejidad: deben ir evolucionando las sensaciones en cada sorbo que des, esto ocurre porque los buenos vinos despiertan tus sentidos.
Las 4 reglas para regalar vino
Siempre debes partir de cumplir las siguientes recomendaciones para elegir una botella de vino.
- La presentación de la botella: la botella es lo primero que nos entra por los ojos, y por lo que nos generamos una opinión u otra sobre el vino. Ten mucho cuidado a la hora de elegir la botella, y piensa en la persona a la que se la estas regalando.
- El nombre: es bueno que un vino tenga un nombre que transmita su historia o que apoye su calidad. Los vinos con nombres graciosos o juegos de palabras pueden ser un buen regalo si a la persona que se lo vas a regalar es alguien que tiene ese tipo de humor. Si por el contrario, le estas regalando el vino con una intención más profunda, busca uno con historia, o que el vino en sí represente tus sentimientos por la persona a la que se lo regalas. Por ejemplo, si quieres regalarle un vino a tu abuelo, te recomiendo el vino Las Sombras Largas, ya que su historia es un homenaje a los abuelos.
- El precio: las botellas que tienen un gran reconocimiento mundial suelen tener un coste muy caro. Es mejor regalar 3 botellas que sean buenas e iguales o similares, que una sola botella que sea buenísima, o 12 de mala calidad.
- La época del año: es importante que relaciones el vino con la época del año. No es lo mismo consumir un vino en verano que en invierno.
¿Cómo envolver el vino?
Ya que tienes el vino perfecto, debes cuidar al máximo los últimos detalles, y no llevarlo en una bolsa del supermercado.
Puedes optar por utilizar una bolsa de regalo, pero no te confundas, que no me refiero a una bolsa de regalo de navidad ni nada por el estilo. Es mejor que selecciones una bolsa con un color neutro y que tenga cierta resistencia. Además, te recomiendo que introduzcas unos toques de washi tape.
Tambien puedes empapelar el vino con papel kraft y la decoración que desees.
Otra opción es que, si vas a regalar más de una botella, o una botella y otro producto, lo puedes introducir todo en una caja de madera cuidando su presentación. Esto hará que a la persona que se lo regales le parezca de mejor calidad.
Te recomiendo, que intentes personalizar el envoltorio, y que nunca dejes de pensar en cómo es y qué gustos tiene la persona a la que se lo vas a regalar.